El Amor

1 Corintios 13:4-8

"Ama a tu prójimo como a ti mismo".

El señor nos amo tanto que nos dejó promesas.

La iglesia no son las paredes. La iglesia somos nosotras, las personas.

Dios nos escucha. El señor toca la puerta y nosotros le tenemos que abrir. Tomar la decisión.

"¿Dónde está tu Dios que no te sana?" Confiar en Él, en hacer su voluntad aunque duela.

Nunca dejar de confiar. Él nos AMA. Nos da vida, alimento, vista, nuestro cuerpo...

Y aunque nos bendiga siempre regresar a Él y ser agradecidos.

En lo bueno y lo malo, no dejar de buscar ni de congregarse a una iglesia.

Buscar siempre el agrado de Dios. El diablo paga mal, está como león rugiente buscando a quien destruir.

Cuando uno conoce al verdadero Dios, ya no querrá volver atrás, y aún en tentación de alejarse, seguir, nunca apartarse.

No juntarme con personas que me tientan a pecar o alejarme. Buscar gente que busque agradar a Dios.

Aún después de desobedecer y equivocarme, pedir perdón y seguir. Dios no está dispuesto a perderme.

Su amor siempre sigue intacto, nunca cambia.

Mientras nosotros somos infieles, Él sigue siendo fiel.

A Dios le agrada que sirvamos, tanto en la iglesia como en casa.

Isaías 54:1-8

La iglesia es la novia de Cristo. Somos del Señor.

No quejarme, no hablar mal ni maldecir. Santificar nuestra mente y boca. Jesús es quien nos defiende.

Todos los días debemos pedir perdón, nadie es más bueno que otro, aún en la iglesia.

Nunca perder el primer amor.

Si algo o alguien me ofrece dejar a Dios, decir que NO. Siempre elegir al Señor.

Somos bendecidos para bendecir.

Seguir caminando y esperar. Hay salvación en su camino.

No solo buscar milagros, buscar comunión con el Todopoderoso. Ser un discipulo, gozarme en Él.

¿Cómo escuchar a Dios? Leer la biblia. El señor nos habla a través de su palabra. Prestar atención cuando leemos, orar y practicar.

Si nadie nos quiere, Él sí nos ama. A Dios nada se le escapa.

Lilian

Domingo 07/09

Iglesia Catedral de la Vida- Barrio San Rafael